La gestora pilotada por Álvaro Guzmán ha aprovechado la volatilidad y caídas en bolsa de los últimos meses para comprar. Así se desprende de la última carta trimestral que ha enviado a sus partícipes y en la que cuenta que el nivel de inversión de su fondo ibérico, Azvalor Iberia, ha pasado del 78 al 95 por ciento entre junio y octubre. Sobre todo, comenta Guzmán, ¿al haber podido invertir desde final de septiembre a buenos precios, en los días de caídas de la bolsa española por el asunto catalán». En concreto, la mayor parte de la liquidez ha ido destinada a entrar en Almirall, FCC y Jerónimo Martins, así como a reforzar sustancialmente la posición en Técnicas Reunidas.

En lo que va de año, su fondo va por detrás del índice y esto conlleva que el potencial actual de la cartera se haya elevado al 55 por ciento, al cifrar el valor liquidativo del fondo en 200 euros, frente a los 130 actuales. De hecho, su optimismo es tal que consideran que ¿Azvalor Iberia está ahora en el momento más atractivo desde que se lanzó si nos atenemos a la relación entre el precio y el valor». Algo que ven como un ¿reflejo del mal comportamiento de la bolsa española frente a la europea».

1.700 millones de euros

La gestora, formada por Álvaro Guzmán, Fernando Bernad y Beltrán Parages (ex Bestinver), cumple su segundo aniversario con 16.000 clientes y un patrimonio bajo gestión de unos 1.700 millones de euros repartido en cuatro fondos: ‘Iberia’, ‘Internacional’, ‘Blue Chips’ y ‘Capital’; dos planes de pensiones: ‘Global Value FP’ y ‘Consolidación FP’; y dos sicavs: ‘Value Selection Sicav’ y ‘Sicav Luxembourg’. Además del capital que gestionan en carteras.

Sobre el tema catalán, consideran que ¿si no se reconduce la situación, lo lógico es esperar una caída de las inversiones, de la productividad y, por tanto, del crecimiento económico. Todos sufriríamos; así que damos a este escenario una probabilidad reducida, ya que no estamos seguros de que una mayoría suficiente elija perder bienestar».

Con respecto a la cartera internacional, el tercer trimestre ha supuesto una oportunidad de vender un ramillete de compañías tras lograr muy buenas rentabilidades: Samsung, DEA, FFP, Thyssen, Savills, Amsterdam Commodities, Dassault Aviation, Fairfax India, Ryanair, Vivendi y Via Varejo. Y los frutos de estas desinversiones se destinaron a incrementar las posiciones

ya existentes en Cameco, Grupo México, Norilsk, Consol Energy y Eurocash, así como a volver a comprar una vieja conocida, Range Resources.

Con todo, la exposición de la cartera de Azvalor Internacional sigue muy concentrada en materias primas, que rondan el 63 por ciento, dividida entre el cobre, el níquel, el uranio, el oro, el petróleo y el gas. Y el resto de las oportunidades han surgido como resultado de grandes caídas: ¿Los inversores, huyendo de la escasa rentabilidad que ofrece la renta fija, se han convertido en compradores forzosos de acciones europeas, llegando a pagar por ellas múltiplos elevados de beneficios también elevados. Esta combinación es suficiente para arrojar fuertes pérdidas de golpe».